10 marzo 2006

Jugando a las películas


A veces Antoñín a eso de las seis de la tarde pasaba por mi piso a buscarme. Llamaba al timbre y me esperaba en la puerta, subíamos en el coche fúnebre de su padre y nos íbamos hasta el tanatorio que, a parte de ser el negocio familiar, también era su casa. Sus padres trabajaban entre “gente que había pasado a mejor vida” según me contaba el propio Antoñín. Mi mejor amigo hablaba con un tono casi susurrante, nunca alzaba la voz y jamás sonreía. Las primeras veces que me contaba que jamás había celebrado un aprobado en matemáticas, me sorprendí, después acabé acostumbrándome. Además me describía con pasión las múltiples y diversas tareas de su “casa fúnebre”; Me explicaba que su madre era tanatopráctico, que su hermano limpiaba la capilla y atendía en el mostrador y que él aún era “demasiado joven para entender estas cosas”. Nosotros nos entreteníamos jugando a las películas en la sala que aquel día coincidiera vacía.

De camino al estanco hoy he vuelto a ver a Antoñín, que ahora ya ha pasado a llamarse Antonio. Hacía años que no sabíamos el uno del otro. Me ha contado que se ha casado, que acaba de tener una niña: Sofía y que iba a la administración a cobrar los cuarenta euros que le habían tocado en la lotería del Estado. Ningún gesto de expresión de alegría en su boca, nada de euforia en su voz.

Me he alegrado de verle, probablemente, y casi con seguridad, sea el continuador del negocio familiar en su quinta generación, sé que le va realmente bien. Lo afirmaría con certeza porque durante el tiempo que pasamos juntos jugando a las películas en las salitas de su casa desarrollamos la habilidad de sonreír con los ojos. Y esta vez he vuelto a ver sus labios ascendentes y sus dientes claroscuros en ellos.

1 comentario:

maria josé dijo...

Hola! Gracias por tu saludo, pensaba que no habia nadie que me viera! Acabo de estrenar mi blog, como podrás ver, aún no tengo muy claro como funciona. En cuanto lo sepa te mando mis coordenadas, vale? Bueno a lo mejor con esto ya te las he enviado.